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La práctica de gimnasia hipopresiva ayuda a mejorar los problemas de retención de orina. Este es el efectivo más conocido de la práctica habitual de hipopresivos. Pero, ¿cómo sucede? Al entender el este proceso ya no te tienes que creer lo que te dicen, aprendes cómo funciona tu cuerpo y cómo puedes ayudarte a ti mism@. Voy a intentar usar términos sencillos, pero algo de ciencia va a haber.

 

Es ascenso del diafragma elevará la masa visceral

Primero de todo: ¿Por qué se pierde orina? En situaciones “normales» en las que no existe una parálisis o problemas orgánicos (tumores por ejemplo), el problema aparece por una incapacidad del suelo pélvico (el esfínter de la.vejiga) para retener la presión.

 

Como habéis visto en la imagen al principio del post, un incremento de la presión de las vísceras sobre el suelo pélvico es el problema, aumentando la presión primero sobre la vejiga (y disminuyendo su capacidad) y después en su esfínter. En casos avanzados hasta una parte de la vejiga puede sobresalir por el orificio urinario, problema que se conoce como cistocele.

 

Si disminuyes la presión que recibe el esfínter, éste será más capaz de retener la orina, y si además conseguimos una disminución de toda la zona visceral, la vejiga recuperará su capacidad de llenado habitual, apareciendo más tardíamente el deseo de ir al baño. Y todo esto podemos conseguirlo gracias a la práctica habitual de gimnasia hipopresiva.

Se ha comprobado mediante numerosos estudios que el trabajo hipopresivo procova la contracción de multífidos además de diafragma, ayudando a distribuir las presiones en la cavidad abdominal y pélvica

Al realizar la contracción hipopresiva (elevación de costillas y ombligo hacia adentro y arriba) en espiración máxima, conseguimos disminuir la presión del suelo pélvico y de la vejiga y útero. Los pulmones ocupan el mínimo espacio posible, y al elevarse el diafragma (todo el aparato digestivo está anclado a él) arrastra consigo toda la masa abdominal, permitiendo al suelo pélvico descansar y recuperar su postura natural. De hecho este efecto de succión o de “desatascador» contrae y eleva también al periné (el suelo pélvico) fortaleciéndolo.

 

Gracias a este mecanismo, y a la reeducación de la faja abdominal, que distribuirá mejor las presiones, verás cómo de manera progresiva tu retención de orina irá mejorando poco a poco.

 

Si quieres conocer más sobre los beneficios de low pressure fitness puedes ver mis otros post sobre sus beneficios, entrar en la web de lpf o poneros en contacto con Iván Fisio, tenemos clases individuales y en grupos reducidos en Zaragoza para adentrarnos en el mundo de la baja presión.